Durante estos días de vacaciones hibernales tuve mucho tiempo para leer y repasar la prensa y darme cuenta de que los periodistas de verdad, los que escriben en la prensa que compramos habitualmente, también hacen vacaciones.
Lo noté en el grosor del periódico que, a pesar de ser más reducido, me cobraron al precio de siempre [cosa a la que ya empiezo a acostumbrarme, más por resignación que por comprensión].
También lo noté, de forma quizás más preocupante, en la calidad de la información: entre guerras, represalias, bombas de fin de año, etc., me sorprende una noticia abriendo la sección de economía: “Un grupo de ladrones da una lección a Madoff” al devolver, cerca del Club de Campo de Palm Beach, una estatua sustraída del apartamento del “mago de las finanzas” con el fin de darle una lección moral al susodicho.
Que quieres que te diga, yo prefiero que me digan “hoy no hay prensa” a encontrarme noticias propias de prensa rosa o incluso amarilla; que conste que no tengo nada contra esos dos colores que, por otra parte y siempre que se trate de decoración o indumentaria, me parecen maravillosos y muy combinables entre sí.
En fin, que hay días que es mejor no tener acceso a la prensa porque las noticias nuevas…tampoco valen la pena.
Lo noté en el grosor del periódico que, a pesar de ser más reducido, me cobraron al precio de siempre [cosa a la que ya empiezo a acostumbrarme, más por resignación que por comprensión].
También lo noté, de forma quizás más preocupante, en la calidad de la información: entre guerras, represalias, bombas de fin de año, etc., me sorprende una noticia abriendo la sección de economía: “Un grupo de ladrones da una lección a Madoff” al devolver, cerca del Club de Campo de Palm Beach, una estatua sustraída del apartamento del “mago de las finanzas” con el fin de darle una lección moral al susodicho.
Que quieres que te diga, yo prefiero que me digan “hoy no hay prensa” a encontrarme noticias propias de prensa rosa o incluso amarilla; que conste que no tengo nada contra esos dos colores que, por otra parte y siempre que se trate de decoración o indumentaria, me parecen maravillosos y muy combinables entre sí.
En fin, que hay días que es mejor no tener acceso a la prensa porque las noticias nuevas…tampoco valen la pena.
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